L'Auditori

Empieza como quien duerme y sueña un sueño intenso, apasionadamente onírico. Ahora una ciudad, pasos, vienen y corren, enérgico pasos, sala, corredores, mucha gente salen al exterior, se sienten trompetas y tambores. Stop stop. Golpes, suspenso flauta trasverso estacato, violines intercalados, flautas trasversos. Termina el primer movimiento de esta hermosa sinfonía de Txaikovski. Finaliza con música mareada, como vahídos del alma, y después, ritmo por excelencia, casi como un aire cubano o algo así.